jueves, 18 de junio de 2009

El castigo

Estaba de pié, mirando de reojo todas las minifaldas, todos los escotes; sus ojos se movían rápido, buscaban una víctima propiciatoria. Necesitaba encontrar alguna mujer con la que aplacar el estres que le producía su lucrativo trabajo. Él trabajaba habitualmente, pasando todo tipo de sustancias psicotrópicas, aunque también practicaba la extorsión, para conseguir la devolución del dinero prestado, con el añadido de unos desmesurados intereses. Esporádicamente, daba alguna que otra paliza para mantener a "raya", a unas mujeres traídas de tierras muy lejanas, que residían en el local de alterne situado en las afueras de la ciudad, propiedad un amigo suyo de la infancia.

Como su altura se lo permitía, apoyó los codos en la barra, pero dándola la espalda para tener la panorámica perfecta de la discoteca. Alguien se había colocado a su lado y estaba esperando que le atendiera alguna de las camareras aspirante a modelo, pero que se quedaría en acompañante sexual de algún cincuentón con pasta. Giró sobre sí mismo para mirarla, su cara era delicada como una taza de porcelana china, iba sobriamente vestida, sin enseñar gran cosa. Su cuerpo no era exuberante, demasiado delgado..pero tenía algo que no alcanzaba a discernir.

¿Oye me dejas que te invite a la copa que estás esperando?, le dijo mientras pensaba si esa chica se comportaría igual que la última a la que intentó invitar. Esa otra le despreció, riéndose en su cara..ella y su amiga..se burlaron de él.. por un momento creyó que la música se silenciaba y todo el mundo se carcajeaba..señalándolo con el dedo. Le espere fuera, dentro del coche, salieron ella y su amiga riéndose (todavía) y dando tumbos. Seguía al taxi por las calles de la ciudad, deseando ansiosamente que la blusa semi-transparente de ella, se apeara de una maldita vez..tuve suerte..muy pronto ella y sus piernas empezaron a salir del interior del taxi. La cogí por detrás fuertemente, la levanté del suelo y la introduje en la parte de atrás del coche, creo que se dio un golpe en la cabeza con el marco de la puerta, lo que hizo más fácil tumbarla en el asiento. Después de maniatarla y amordazarla, conduje hasta un paraje inhóspito y allí..le dí su merecido. Los periódicos del día siguiente se hacían eco del hallazgo de una mujer que había sido violada y posteriormente asesinada, no se conocían más detalles, por que el caso estaba bajo secreto sumarial..¡qué ignorantes!..yo si que sé..que le pasó a ella. Pero esta chica, no era igual, lo constató cuando oyó de sus sonrientes labios carnosos: Un Martini blanco..pero después..¿me puedes llevar a un sitio más íntimo?

Estaba tumbado en la pobre cama de un hostal céntrico, relamiéndose con el pensamiento de lo que iba a disfrutar con aquella chiquilla, entonces ella saltó sobre él, apretando sus aparentes frágiles piernas contra sus caderas, le cogió la cara con ambas manos y le dijo: recordarás sólo mi nombre..me llamo..Olvido.

Despertó..estaba solo, hacía frío en la habitación..tuvo una revelación..entendía por que le habían castigado y cual era el castigo. Olvido..ya nadie le conocería jamas, ni le reconocerían, nadie se acordaría de él, su identidad se había esfumado, sería invisible para todo el mundo..una sombra muda. Mientras intentaba asimilar su nueva condición, esperaba notar el calor expandirse por su pecho..el calor de la abundante y densa sangre, que debiera manar del profundo corte que había ejecutado en su cuello, con los 10 centímetros de filo pertenecientes a una navaja recién estrenada. Al palparse el cuello, descubrió que la raja había cicatrizado instantáneamente y comprendió que tendría que penar y cumplir su castigo, hasta que volviera a aparecer en su triste vida..su carcelera, su verdugo..la dulce Olvido.
  • Sesión castigadora:
Yo: ¿Cree usted que los criminales pueden recibir un justo castigo en la vida terrenal y según las leyes de las sociedades actuales?

Mi Querido Psicoanalista: El castigo, como otras tantas cosas es subjetivo, cada persona adjudicaría diferentes tipos castigo, para el mismo crimen.